La palabra vida procede del latín vita, hace referencia a
aquello que distingue a los reinos animal, vegetal y otros del resto de
realidades naturales. La vida implica las capacidades de nacer, crecer,
metabolizar, responder a estímulos externos, reproducirse y morir. Los seres
vivos pues nacen, crecen, se
reproducen y mueren, necesitan energía, para lo cual tienen que nutrirse. Esto
lo aprendimos ya en la escuela y lo siguen aprendiendo los niños.
El estudio de la vida lo realiza la biología, pero no sólo es
estudiada la vida por los biólogos, sino también por otros muchos más:
filósofos, teólogos, escritores, médicos, psicólogos, científicos de distintas
clases.
Para la medicina la vida vegetativa es
un conjunto de funciones involuntarias nerviosas y hormonales, que adecuan el
medio interno para que el organismo responda en las mejores circunstancias a
las condiciones del medio externo. Para Paul Nurse, Premio Nobel de Medicina de 2001 en su libro ¿Qué es la vida? publicado en GeoPlaneta 2020 nos dice: "La vida no existiría sin los genes. Cada nueva generación de células y organismos debe recibir las instrucciones genéticas para crecer, funcionar y reproducirse. Esto quiere decir que para cualquier entidad viva perdure, los genes deben ser capaces de replicarse precisa y minuciosamente, para que las secuencias de ADN se mantengan constantes a través de múltiples divisiones celulares y superen la prueba del tiempo".
Desde un punto de vista
bioquímico, la vida puede definirse como un estado o carácter especial de
la materia alcanzado por estructuras moleculares específicas, con capacidad
para desarrollarse, mantenerse en un ambiente, reconocer y responder a
estímulos y reproducirse permitiendo la continuidad. Todos los seres vivos
realizan tres funciones básicas: la relación, la nutrición y la reproducción.
Para la física y
otras ciencias afines, la vida hace referencia a la duración de las cosas o a
su proceso de evolución.
La vida es el reino de lo no
lineal, de la autonomía del tiempo, de la multiplicidad de las estructuras,
algo que no se ve en el universo no viviente. La vida se caracteriza por la inestabilidad por
la cual nacen y desaparecen estructuras en el tiempo.
Para Ilya Prigogine, premio
Nobel de Química la vida es el tiempo que se inscribe en la materia y los
fenómenos irreversibles son el origen de la organización biológica. Todos los fenómenos
biológicos son irreversibles. Esta irreversibilidad es una propiedad
común a todo el Universo, todos envejecemos en la misma dirección, porque existe
una flecha del tiempo. Para Prigogine es la función la que crea la estructura y
los fenómenos
irreversibles son el origen de la organización biológica, es decir, de
la vida. La vida no se corresponde a un fenómeno único e inalterable.
Para la psicología la vida es unos
sentimientos que se va formando en la persona por las interacciones del ego con
el medio, y,
por la reacción a dicho sentimiento.
El
concepto de vida o existencia para los filósofos es
inseparable del de muerte o inexistencia, y de su trascendencia. La vida ha
sido y es diferente en los distintos lugares y épocas de la historia de la
humanidad y en cada persona. La vida influye en el lenguaje, de forma que son
numerosos los diferentes usos y expresiones del término vida.
Para las religiones
monoteístas, que afirman que sólo existe un Dios, consideran que la
vida de la persona es la unión del alma y del cuerpo, de forma que se
diferencia entre la vida del cuerpo, que es mortal, y la vida del alma, que es
espiritual y eterna. En la religión cristiana la vida humana es
un paso que conduce al alma de la inexistencia a la plenitud eterna en un
período de tiempo.
La vida personal es
un asunto inmensamente importante y complejo para conocer, interpretar y
llevarla adelante. Miles de personas en todo tiempo y lugar han intentado
comprender la vida, analizarla, especialmente lo han hecho los filósofos y los
escritores.
Los
resultados de estos análisis o experiencias de vida son muy diversos. El objetivo de la
vida es el desarrollo pleno del individuo, en nuestro caso de la
persona. Sabemos que la vida, la vida de todas las personas se compone de una serie continua
de alegrías y tristezas.
El
escritor irlandés Óscar Wilde muestra a un amigo los profundos cambios que
puede traer la vida a la persona, son las vueltas o retrocesos de la vida:
La vida que tanto he
amado, ¿demasiado?, me ha despedazado como un tigre, así que cuando vengas a
verme comprobarás la desastrosa ruina en que se ha convertido, lo que en otro
tiempo fue maravilloso y brillante y terriblemente improbable”.
Las causas
de estos profundos cambios o vueltas de la vida son múltiples y variados según cada persona.
Óscar Wilde expresó con estas sinceras
palabras al final de su vida sobre la causa de su caída en desgracia y su posterior exilio en París:
Debo decirme a mí mismo
que yo he sido la causa de mi ruina, y que nadie, grande o pequeño, puede
arruinarse salvo por su propia mano.
La
definición única y universal sobre la vida se nos plantea como algo tremendamente
difícil.